Dejen en paz las playas

Espetos en un chiringuito.

En la Demarcación de Costas deben de aburrirse mucho. Si no, no se entiende que cada dos o tres meses amaguen con un escándalo a cuanta de los chiringuitos. Ahora, coincidiendo con el inicio de la temporada alta, amenazan con retirar las terrazas situadas en las playas. Y no contentos con eso ya le han dicho al Ayuntamiento de Málaga que se vaya buscando otro sitio para la celebración del pregón de la Feria de Agosto, que se viene haciendo en la playa de La Malagueta desde el año 2005. Supongo que para no quedar como los ogros de la película dicen que el día de San Juan sí permitieron la celebración del concierto en ese mismo sitio por la falta de tiempo para buscar una alternativa. ¿Y dónde pretenden buscar la alternativa que no sea la playa? A ver si se enteran que la noche de San Juan en Málaga, como en la mayor parte de los sitios costeros de España, se celebra junto a la playa. Los argumentos, además, para tantas exigencias, son estúpidos. Nuestras playas no se estropean porque una o dos veces al año se celebren conciertos en ellas o porque los chiringuitos pongan sus terrazas en la arena. Más nos valdría a todos, si tanto interés tienen por defender el dominio público marítimo terrestre, que hicieran cumplir las leyes. ¿Dónde está el dinero que prometió la entonces ministra Cristina Narbona para la compra de los terrenos de Arraijanal? ¿Por qué no se ha cumplido ya la sentencia que obligar al derribo del hotel del Algarrobico? ¿Por qué en nuestra Costa del Sol sigue habiendo edificios construidos directamente sobre la playa? Esas sí son cosas que estropean nuestro litoral. Pero los chiringuitos, las terrazas y los espetos déjenlos de una vez donde están. Más aún cuando dentro de muy poco las competencias sobre todas estas cosas dependerán de la Junta de Andalucía. franciscompastor@gmail.com